SOBRE LOS AMIGOS

Para qué quiero a los amigos ?

Los quiero para compartir las cosas, las vivencias,

las alegrias, las emociones.
Para saber que un amigo sienta que uno siente
algo especial y que se lo haga saber con la mirada. 

Para ayudarlos y si hay que caer, hacerlo juntos.

Para sentir como con uno se levantan
y pedirnos ayuda cuando estamos en el piso.

Parado se mantiene cualquiera.

Mientras no caigas no vas a darle valor
al hecho comun de estar parado.

Los quiero para acompañarnos en las derrotas,

para el abrazo sin palabras de un triunfo.

Para poner compresas en las heridas del corazón,

para acariciar la piel que forman las cicatrices.

Para reírnos  de la cara de mapa que nos dejan las batallas. 

Para las victorias y los momentos buenos están siempre los otros, 

los amigos del campeón, siempre en las buenas,

que desaparecen al final del verano
cuando el otoño llega cada tanto al coure
y la realidad es a veces el insomnio cotidiano,

y la vida, otra vez, nos vuelve a cagar a palos.

Saber ganar sabe ganar cualquiera

en saber perder esta el gen del propio conocimiento,
la escuela del dolor, y porque no, 
también el gen de la felicidad 

Saber conocer el fondo del tacho es el secreto
para empezar la remontada hacia la luz del día
donde un sol de justicia entibia todo.

Los quiero para jugar las partidas difíciles 

Para caer juntos, sin reproches. 

Para decirle loco tomatelas de acá y que sepa que es por su bien,
como han hecho conmigo.

Para decirle llora tranquilo que también llorar es de hombre,
la puta que te parió. 

Para ver en tus hijos y en los de ellos que la cosa sigue. 

Que todo pasa,

y que lo único que no se acaba

es el futuro y las ganas perennes
de ser jovenes hasta morir de viejos,

las ganas de tragárse todo el viento,

como cuando éramos pibes,

como cuando nos enamoramos por primera vez,

como cuando luego de varias batallas 

con suerte dispar, 

una esperanza nos vuelve a hacer arder el pecho. 

y nos hace cantar como energúmenos 

y nos hace reír, 

y nos hace saltar. 

Nos hace sentir  que todo,
aunque hayan pasado muchas cosas,
esta por pasar.

Para eso sirven, digo yo.

Para eso los quiero,
por eso los quiero.

Gracias amigos, 

por bancarme, por aguantarme,

por aceptarme con mis mataduras, 

con los muertos que tengo en el placard,

con las broncas y con las risas,

y con el corazón en la mano.