PADRE SEPARADO DE VACACIONES y ALGO SOBRE LA SOCIEDAD "MACHISTA"
Es el tercer verano que vengo con mis hijos de vacaciones los tres solos.
Ya no me molesta el hecho de estar solo con ellos, lo veo algo natural, y disfruto muchisimo estos dias de vivir las veinticuatro horas juntos.
Antes, cuando formaba parte de una familia de a cuatro, miraba a los hombres cuando estaban juntos con sus hijos y la verdad, me daba lastima, pensaba pobre tipo, un divorciado, como si estuviera apestado. Miraba como se le iba la mirada observando a sus hijos, pensaba que el tipo queria como exprimir el momento, me daba la impresión que esa persona no estaba completa, un rengo emocional, yo que se, algo disonante.
En esta sociedad que algunos llaman machista, como dice Rolando Hanglin, de tanto proteger al sexo femenino, de tanta proteccion, al final el tipo queda en algunos casos hecho un trapo emocional ademas de aparecer siempre como el animal, los reclamos, los enojos, las cuotas alimentarias, las horas sin los hijos, la culpa omnipresente instalada por un ejercito de juezas, abogadas, psicologas, medicas, cosmiatras, peluqueras, amas de casa mal atendidas o enojadas con la vida, amigas, hermanas, cuñadas, madres, el chusmerio y otras yerbas mas que en otra oportunidad seria lindo desarrollar, al hombre se lo ha convirtiendo en un ser incapaz, atado, bestial, maleducado, agresor constante sea fisicamente u oralmente o en la forma de caminar o de estornudar. Bestia, violento maleducado y todo lo otro siempre y cuando no haga lo que se espera de el. Y que es lo que se espera puede uno preguntarse, se espera lo que el otro sexo dice que el hombre tiene que hacer. Pagar los alimentos lo primero como si la obligacion alimentaria no fuera de ambos padres, continuar con su papel de eterno dador, dejar todo, y ayudar al sexo debil que siempre es un mar de sufrimiento y de lagrimas y de lucha, (lagrimas y dolores y lucha que las representantes del sexo debil deben librar solas contra la vida y por los hijos – como si los hombres no hicieran las cosas por los hijos- y lucha esta que dan ellas solas y a la que han sido arrojadas invariablemente por el hombre - violento - agresor - bestia - despreocupado - veleta - mujeriego). Ademas de esto invariablemente debera el hombre qeudar sometido a una especie de patronado de liberados ejercido por las mujeres de su vida obviamente que le diran que debe y que no debe hacer, no se te ocurra hacer esto, alli no vas, estas con tus hijos, pensa bien que vas a hacer queres, queres madurar de una vez por favor, menos mal que te largue, estoy preocupada por tus conductas, no podes salir con esa, voy a tomar medidas, te los llevas pero a las diez y cuarto tienen que estar de vuelta que mañana me tengo que levantar a las nueve, entendiste, entendiste, entendiste. Ahí no vas con los chicos. Ahi podes ir, ahi te dejo, pero en barco.
Un eterno actor de reparto en el juego de la vida.
Todas las sindicaturas y juzgamientos y batallas siempre perdidas que un hombre va teniendo en la vida siempre a manos del mal llamado sexo débil (porque ya no lo es, y a la que diga otra cosa que venga que la recago a trompadas), hacen que cuando un tipo esta solo con sus hijos de para esta concepcion de las cosas la sensacion de un rengo, de algo disonante. Nadie se asombra de ver a una madre con sus hijos sola, no ocurre lo mismo con un hombre solo con sus hijos.
No es asi, o no debiera, el tema pasa por la cabeza de uno basicamente, pero son años y decadas de machacar con un modelo, y cuesta hacer volar a los pajaritos cuando tienen alas de plomo. Eso es lo que yo sentía, pobre tipo, todo cascoteado, y ahora que estoy en el baile y con los zapatos lustraditos la verdad es otra cosa
Yo salgo bastante con mis hijos, a cenar, paseos cortos, escapadas de fin de semana, partidos de Lanus en el interior, vacaciones de invierno y verano y tengo establecido con ellos una comunicacion que antes no tenia, hay una aceptacion mutua de la forma de ser del otro sin reproches ni juzgamientos, una comunicacion intensa y unos codigos que siendo mis hijos adolescentes hemos establecido y que realmente nos hace sentir muy bien y muy felices al estar juntos.
Es entonces esperar el momento de estar con ellos en estas ocasiones de viajes o salidas cortas con alegria, y vivir alegre los momentos, y tambien es aquello que intuia cuando veia a otras personas en el lugar que yo me veo ahora, atesorando momentos, generarando añorables y dulces futuros recuerdos de estos momentos, para los tres, no solo para mi.
La vida es una sola, y es un conjunto de buenos momentos en un programa que a veces suena desacompasado.
El hombre se desenvuelve a veces torpemente junto a sus hijos, y es porque quiere o pretende hacer de madre, cuando es claro que los hijos madre tienen, uno es el padre, no la madre.
Porque la sociedad (machista) le da al varon el papel de dador, no de receptor. Porque del hombre siempre se espera, no se le pregunta que queres, que te gusta.
Y asi andamos y/o andabamos muchos especimenes primitivos por la vida, buscando algo que arreglar, a quien apoyar, que mochila cargarnos.
Y claro, cuando nos dejaban con nuestros hijos, territorio poco conocido, no se sabia que hacer.
Pero el tiempo y la soledad van enseñando, se hace camino al andar dice el Nano Serrat citando a Machado, ademas de alguna leccion de egoismo que nunca esta demas, como son las cosas, como se disfruta de los seres amados, hijos, amigos.
Tarda uno en salir de ese termo. Superar eso es algo que nadie sabe como se puede hacer, pero se logra.
Es el tercer año que vengo con mis hijos en el verano solo con ellos, y no creo que pudiera pasarlo mejor de otra manera.
Que se esperan y se cumplen inexorablemente, mostrando que el mundo esta en orden que los planetas están alineados.
Las medialunas de Atalaya
Debate tema: Agarramos por Esquina de Crotto o seguimos hasta Las Armas.
El radar puto de la autovía Madariaga Pinamar, a cinco kilometro de la rotonda de Madariaga.
Apenas se ven los bosques de Pinamar, poner a todo volumen una canción Punchi Punchi como dice Carolina.
El bocinazo en el cartel de Pinamar enfrente de la terminal.
Entrada al departamento de un ambiente. A ver como lo dejaron? Bastante bien quedo, no hay nada roto.
Daniel el encargado, con su sonrisa y humor a prueba de balas. Como andan? Bueno, ya llegaron, ya están aca, tranquilos y a disfrutar.
Luis, que espia desde su local de ropa, como una señora chismosa.
La pareja de abuelos de Avellaneda, que son miembro del consejo del consorcio, y que siempre, invariablemente, están en el edificio cuando estamos nosotros y se ponen a hablar de cualquier cosa.
Daniel baldeando la vereda, todos los días a las ocho.
La zambullida matutina, también a las ocho, mientras los chicos duermen.
La panadería La Santa Maria, de Jason y Constitucion. Hola, volvieron, que alegría, como andas, tus nenes, y el perrito?
Las tostadas que se van haciendo mientras los chicos se van despertando.
El desayuno con tostadas recién hechas, mermelada, manteca, chocolatada, cereales, mate, fruta, en el balcón.
La lagarteada en la playa, calentando la piel.
El olor a choclo hirviendose, en la playa, a las doce del mediodia.
La playa de los toboganes.
El olor a eucaliptus y a pinos.
La vista de Bunge desde el balcón.
La caminata hasta el muelle, la caminata hasta Robinson Crusoe, la caminata hasta la Rambla de Ostende, a la manaña temprano, al mediodía, o a la tardecita.
Las paleteadas en la orilla esquivando caminantes.
La rotisería La Esquina de Azu, al mediodía.
Las empanadas del tucumano.
Los panqueques de Carlitos, a la vuelta del departamento.
La entrada a los medanos por La Frontera.
El Mas Alla al atarceder.
El viaje hasta el faro Querandi, pasando Mar Azul.
Mar de Las Pampas, tambien cuando cae la tarde.
Caminar por Bunge entre Libertador y la playa, a la noche.
La caminata por la Avenida 3 en Villa Gesell.
La feria Hippie de Gesell.
El paseo de los artesanos.
La arena caliente como vidrio derretido.
Y mas viento, y mas, y mas viento todavía.
VAMOS ARGENTINA CARAJO!!!!!!!!!!!!
Las vacaciones con los chicos son la idea del tiempo detenido.
Momentos, una sucesion diaria y horaria de momentos, de guardar imagenes, de atesorar.
De fotos mentales y del corazon.
Estar en el bosque viendo como Carolina anda en el cuatri mientras con el hermano la vemos ir y venir sentados en una sillita en medio de un pinar. El mundo en ese momento esta en orden, puede venir un tsumani ahi mismo que salgo de esta vida feliz y completo.
Estar en la playa, los tres sentados, mirando el mar, al mediodia, sin decir una palabra, sabiendo que los tres nos tenemos mutuamente.
La ceremonia del cuatri cada vez que vamos a la playa. La guardería, ver como ellos dos controlan todo, como se dan el casco.
Ver a caro con el cuatri por el espejo retrovisor volviendo de Valeria, verle la cara de contenta con los cachetes bronceados pero colorados, como dos frutillitas como cuando era una nenita, los ojitos encendidos.
La sonrisa de Carlitos, una sonrisa franca, libre, plena. El control a que somete todo lo que hace.
Uno se siente BIEN, MUY BIEN.
Ayer a la noche, por ejemplo, en Gesell los tres nos sentamos a ver un concierto de rock de un grupo local, y saltamos los tres con el cover de Jijiji de los Redondos, salimos euforicos, imposible olvidarse.
No es facil por ejemplo estar veinte minutos junto a otras personas sin decir nada, por lo menos no es facil para mi, y eso lo logro con mis hijos, y es un silencio comodo, agradable, calido. Me pasas siempre en la playa.
No es facil que uno se ponga a cantar en el auto y que los demas tambien canten, que a uno no lo amonesten por ello.
Es bueno que uno sepa quien es el que esta al lado, saber y confirmar todos los dias la calidad de la madera que tienen, y que ellos sepan quien es uno y de que madera tambien esta hecho. Y es bueno saber que ellos saben y que ellos sepan que uno tambien sabe.
Es gratificante comprobar que saben lo que son los codigos.
En la playa, en un restaurant, en los medanos, en la ruta, en el bosque.
Tambien lo detendria en el departamento cuando hago las tostadas y ellos aun duermen.
El tiempo no pasa, o se detiene, junto a mis hijos, aunque es una ilusion, y es claro que pasa y muy rapido, por eso la idea de atesorar estos recuerdos, para los tres.
Recuerdos que gracias a Dios guardo a la vez de mis viejos, y que siempre les cuento a mis hijos.